Durante los primeros nueve meses de 2024, la distribución de neumáticos para vehículos pesados ha caído un 7,4%. Esta bajada ha generado preocupación tanto en los sectores del transporte de mercancías como de pasajeros, afectando a fabricantes y distribuidores.
Causas principales de la caída
- Desaceleración económica: La ralentización en la industria ha reducido el uso de camiones y autobuses, provocando menor desgaste de neumáticos y un retraso en las renovaciones.
- Inflación: Los precios elevados han llevado a las empresas a postergar inversiones en el mantenimiento de sus flotas.
- Auge del mercado de neumáticos reciclados: La búsqueda de alternativas más económicas, como los neumáticos reciclados o de segunda mano, ha desplazado las ventas de neumáticos nuevos.
Consecuencias para el transporte de viajeros
El sector del transporte de pasajeros, como las empresas de autobuses y minibuses, también se ha visto afectado. Entre las consecuencias más notables se incluyen:
- Menor renovación de flotas: Las compañías están optando por prolongar la vida útil de los neumáticos actuales, lo que podría poner en riesgo la seguridad vial.
- Aumento de costos de mantenimiento: Retrasar la compra de neumáticos nuevos puede conllevar un incremento en las revisiones preventivas y un mayor riesgo de averías en carretera.
Perspectivas para el sector
Aunque algunos expertos predicen que esta tendencia a la baja podría continuar, otros confían en que una recuperación económica y el impulso a medidas sostenibles puedan reactivar la demanda de neumáticos nuevos, especialmente aquellos diseñados para reducir el impacto ambiental.